Maraton Parte 3/3: Capitulo 10.

"Sólo quiero desaparecer"

-Narra Sam-

Lo conseguí. Creí que no lo haría, pero lo hice. Al fin, __(TuNombre) me perdonó. Otra vez soy su amiga, y estoy feliz por eso. Creí que me mandaría a la mierda, pero no lo hizo. 

Y fue una estúpida.

¿En serio se creía que yo sería su amiga? Antes de saber que vivía con Justin, lo hubiese sido. Pero ya no. Pero a Justin no le gusta que la deje sola, por eso le pedí perdón. El último día que salimos me pidió que me echó de su casa y después de eso se comportó extraño. No me contestaba al celular ni a los mensajes. Y supe lo que tenía que hacer. 

Pedir perdón a __(tunombre). Aunque ella no lo admita, sé que Justin le gusta un poco. En fin, no la culpo. Justin es guapo. Pero a mi me gusta más porque es rico. Así me puede comprar todo lo que yo le pida. El plan es invitar a los dos a la fiesta, y conseguir que Justin me bese. Pero lo haré cuando ____(tunombre) esté delante. Así verá que me besó y lo dejará en paz. Justin será solo mío y ____(tunombre) estará tan dolida que no le importará ninguna escusa de él.  Y estoy segura de que entonces, Justin vendrá por mí. 

-NARRAS TÚ-

Salí de la ducha, me sequé el pelo y me vestí:

Me miré en el espejo y, sé que dirán que tengo mucho ego pero, lucía hermosa. Me maquillé y me hice unos rulos a los lados de la cara. Cuando estuve lista, esperé a que Sam llegase. 

Para pasar el tiempo bajé. Y allá estaba Justin, con el celular. Cuando me vio, sus ojos fueron directamente a mi escote. 

-Uau...-Susurró, sin apartar la mirada. 

-¿Qué tanto mirás?-Dije, burlona e incómoda. 

-Lo hermosa que estás.-Me miró a la cara y sonrió, medio divertido. 

-Y mis pechos.-Me senté. 

-Me pillaste.-Y siguió viendo la tv. Tocaron el timbre y los dos nos levantamos. 

-Tu no vendrás con nosotras, ¿o sí?-Dije, alzando una ceja. 

-Sí. Me retiraron el permiso de conducir. ¿Cómo iré a la fiesta?

-¿Te retiraron el permiso de conducir?-Dije, sorprendida. 

-Sí. Por conducir drogado.-Abrí grandes ojos y me quedé sin palabras.-No me mires así, yo no conducía.-Sentí un gran alivio.-Pero el coche era mío.-El timbre volvió a sonar. 

-Está bien. Vamos.-Me dirigí a la puerta, pero me detuvo. 

-Debo decirte algo.-Otra vez sonó el timbre.-Me voy en una semana. Tal vez menos. 

-¿Qué?-Estaba sorprendida. 

-Sí. Tal vez sea más semana porque hubo problemas, pero si todo sale bien en una semana me pierdes de vista.-¿Perderte de vista? ¡Es muy poco tiempo! 

-¿Qué pasará después?-No quería alejarme de él. 

-Seguiremos en contacto.

Tragué saliva y asentí. Nos dirigmos a la puerta, y allá estaba Sam. Se había ondulado su largo pelo rubio, y lo había dejado suelto. Vestía así: 

-Uau.-Repitió Justin. 

-Estás hermosa.-Dije. 

-Gracias. Tu igual. No tanto como yo, pero igual estás hermosa.-Me quedé mirandola, sorprendida. Justin se mordió el labio, conteniendo la risa. Me hirió el ego.-¿Vamos?-Nos miró a los dos. 

-Sí.-Susurré, enfadada. 

Nos montamos en el coche. Ya era de noche y Atlanta estaba iluminada por miles de luces.

Sam nos llevó a través del bosque. Otra vez me sentía sola. No paraba de hablar solo  con Justin. Aunque de vez en cuando se dirigía a mí.

-¡Llegamos!-Paró el auto y yo miré por la ventana. 

Allí, en mitad del bosque, había una mansión. Justo al lado se veía un pequeño lago. La casa era gigante, pero parecía antigua. 

-¿Os gusta?-Preguntó Sam. 

-¿Aquí vive tu primo?-Pregunté, y ella rió. 

-¡NO! Esta casa es de mi primo y mía. Era de mi abuela, pero cuando murió pasó a ser nuestra. No la utilizábamos para nada, y pensamos que dar una fiesta aquí sería genial. Es grande, la ciudad está aquí al lado y no hay vecinos que molesten.-Se encogió de hombros. ¡Yei! 

-¡VAMOS!-Gritó, Justin. Reí por su entusiasmo y me bajé del coche. 

Nada más entrar, vi a personas no muy diferentes a mi. Seguramente, no habría nadie mayor a veinte años y había música y bebida por todos lados.

Una chica se acercó gritando a nosotros. 

-¡SAAAAM!-La chica tenía el pelo color rosa. Le dio un beso a Sam y le dijo algo al oído. Sam asintió y se acercó a Justin y a mí.

-¡Ella es Nátali! ¡Es amiga mía!-Gritó, para que nos enterásemos, ya que la música estaba puesta muy fuerte.-Ella es __(tunombre).-Natali me sonrió.

-¡Me han hablado mucho de ti!-Se acercó a mi y me abrazo.-¡Vamos! ¡Baila conmigo!

Me arrastró a la pista y comenzó a bailar al ritmo de Trumpets, de Jason Derulo. Yo me comencé a mover igual y vi que Sam y Justin me miraban, sonriendo. Nátali me pasó un vaso, o dos, no recuerdo bien. Me giré hacia Justin, pero no estaba. Ni Sam. ¿Y estos dos?

Me fui a buscarlos, pero Nátali me sujetó. 

-¿Dónde vas?-Me dijo al oído, riendo.-Quédate aquí. 

Sonreí y me seguí moviendo en la pista. Me iba a olvidar de Justin por una vez en mucho tiempo. 

***

Había bailado con muchas personas. Ni siquiera sabía que hora era. Solo escuchaba voces y música en mis oídos, y sentía alcohol en mi estómago. 

Recuerdo que peleé con un tipo porque me molestaba. 

Había bebido bastante, pero me contenía en pie y pensaba con claridad. Nátali no me dejaba sola ni un segundo. Pero, no sé cuando, de repente desapareció. 

Me fui a buscar a Justin y Sam. Debían estar juntos. Pasé por al lado de Nátali, que estaba besándose con un chico mucho mayor que ella. 

-¿Bailas conmigo?-Me susurró alguien al oído. 

Mariposas volaron en mi estómago. Él. Me había pedido bailar.

Zac.

-¿Qué haces aquí?-Pregunté.

-Me aburrí en aquella fiesta, y me escapé con unos amigos.-Reimos.-¿Bailas?

-Claro.

Y nos perdimos en la pista, los dos solos. Bailando Wiggle. 

-MÁS TARDE-

Zac y yo habiamos salido de la fiesta. No nos apetecía estar más dentro y estabamos sentados en la orilla del lago. 

Estabamos riendo por mis burlas hacia él y su baile. No sabía bailar jajaja. 

-No te rías de mí.-Puso ojos de perrito mojado. 

-En realidad, me parece dulce que no sepas bailar.-Me miró, con una sonrisa ladeada.-Tengo frío. Será mejor que me vaya a casa. No encuentro a Justin y Sam y no veo el auto. A lo mejor se fueron.  

-Espera, llamo a un amigo y le pido el coche para llevarte.-Se levantó. 

-Da igual. Puedo ir andando, la ciudad no está muy lejos...

-No te pienso dejar ir sola.

-En serio, no hace falta que me acompañes...-As Long As You Love Me. Esa canción comenzó a sonar en la casa y yo me giré, triste. 

-Me enteré de que Justin Bieb está aquí. Lo invitaron a la fiesta. Seguramente pusieron la canción por eso.-Dijo, con desprecio. 

-¿No te gusta Justin?

-No te ofendas. Entiendo que a ti te guste, pero a mí no. No hay ni una canción que me guste de él...

-No me gusta.-Admití. 

-¿Qué?-Dijo, confundido, 

Suspiré. 

-Te contaré todo.-Y eso hice. 

Le conté todo. Le dije que Justin se quedaba en mi casa por problemas, que nadie lo podía saber y que Justin era un gran amigo. 

-Él y yo...estábamos muy unidos. 

-¿Estabáis?-Preguntó. 

-Se distanció. 

-Es un estúpido.

-Somos unos estúpidos.-Miré hacia el lago. 

-Te gusta.-No era una pregunta. Lo miré, sorprendida. Él solo se limitaba a mirar a otro lado.-Por eso estabas así ayer en el parque.  

-No te voy a mentir.-Dije. 

-Pero el no te corresponde.-Me miró.

-No quiero hablar de eso.-Me dispuse a marcharme. 

-No te vayas.-Me siguió y me pegó a él.-Quedate conmigo. Yo si te correspondería.

-Contigo es muy diferente. Siento algo por ti, pero...-Pero mis sentimientos hacia Justin son más fuertes. Quise acabar la frase, pero no pude. Me besó. Le devolví el beso, desesperada por que significase algo para mí...

Pero no fue así. Solo pensaba en Justin. 

-Lo siento.-Susurré y me separé. 

Fui lo más deprisa hacia la casa, con un nudo enorme en la garganta. Necesitaba llorar, solo porque estaba decepcionada y triste. Y aunque fuese una tontería, necesitaba hacerlo. 

-___(TuNombre).-Me llamó alguien. No puede ser. ¿Nátali?-¿Dónde estabas?-Me preguntó, sonriendo. 

-Por ahí.-Me limité a decir. 

Me miró fijo, y pude ver que ahogaba una sonrisa. 

-Entiendo.-Enseguida supo que necesitaba llorar. ¿Tan obvio era? Se acercó a mí y me susurró al oído.-Sé de un lugar donde podes estar tranquila. 

-Gracias.-Asentí y la escuché atentamente mientras me explicaba por donde ir. 

Subí las escaleras. El pasillo estaba lleno de personas comiendose la cara(por si no saben, comerse la cara=besarse). Llegué a la puerta que me había dicho Nátali. Se suponía que no había nadie. 

Pero no era así. 

Nada más entrar, mis ojos se humedecieron. 

Justin y Sam. Juntos. Estaban medio desnudos, tirados en la cama y besandose. Supe lo que querían hacer. Sam me miró y rió, medio divertida y nerviosa. Y Justin me vio, preocupado. 

-Lo siento. Pensé que no había nadie.-Susurre y salí, mientras una lágrima caía por mi rostro.

Solo quería salir de allí. Solo quería desaparecer. 

Lo último que escuché, fue a Justin gritar mi nombre.

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¡HASTA AQUÍ MI PRIMERA MARATÓN! ¿Les gustó? ¿Qué opinan?

Espero que les haya gustado y que no me maten por dejarla ahí :) 

¡Muchas gracias a las que me desearon suerte en el examen! Creo que podré aprobar jaja. 

¿Qué piensan de Zac y Sam? No les puedo adelantar nada, así que tendran que esperar a que suba para saber jaja :) 

Ya no les molesto más. Comenten y besos<3